Ambos fuimos a sentarnos a nuestros lugares pero nuestros movimientos eran rígidos y forzados, no queríamos separarnos. Al sentarme pude ver más de cerca al chico, si, era idéntico a mi Edward pero eso era imposible o no? Bueno empezaba a dudar que hubiera cosas imposibles, es decir existen los vampiros, hombres lobo y posiblemente hasta los hechiceros, porque no habrían de existir descendientes iguales a nosotros? Incluso parecía más creíble que vampiros y hombres lobo. Si, definitivamente era posible.
-Muchachos, olvide algunas cosas en mi auto vuelvo en unos minutos- dijo el profesor sacándome de mis pensamientos, para en el momento de terminar la oración desaparecer de nuestro campo visual
-Hola- dijo el chico de abundantes ojos verdes mientras mi celoso vampiro soltaba un gruñido "Edward, amor, tranquilo te amo y nada más importa. Por favor no cometas ninguna imprudencia" pensé mientras removía mi escudo para que pudiera escucharlo y de reojo lo vi asentir sonriéndome amorosamente para volverse al escuchar a su compañera de banco, bufe y mi Edward sonrió
-Hola- respondí al chico
-Eres Isabella McCarty- afirmó y Edward soltó un bufido
-Solo Bella- contesté sonriendo con superioridad al reconocer que la reacción de mi esposo había sido igual a la mía cuando esa chica le habló a MI ESPOSO coqueteándole pero luego mi sonrisa se amplió al recordar las tantas veces que había utilizado esas mismas palabras hace tantos años en este mismo salón e instituto
-Mucho gusto, yo soy Edward Anthony- respondió y mi boca se abrió, es que además de ser idéntico a mi Edward debía llevar el mismo nombre?- pero prefiero que me llamen Anthony- continúo
-Mucho gusto Anthony- respondí recomponiéndome y en ese momento llegó el profesor, yo entre aliviada y asustada le puse atención; a penas sonó el timbre y Edward salió junto conmigo casi corriendo del salón para adentrarnos en el bosque, cuando estuvimos lo suficientemente lejos ya adentrados en la profundidad del bosque nos detuvimos
-Que fue eso?- murmure atónita
-No lo sé-
-Edward, tengo miedo. Que se supone que hagamos en casos como estos?-
-Bella no te preocupes, nada malo pasará, no lo permitiré-
Me abrazo y nos quedamos en esta posición disfrutando de nada mas que los dos juntos y sin complicaciones
-Edward?- susurre contra su pecho
-Mmm?-
-Que averiguaste de la chica?- mi curiosidad era muy obvia en mi voz con un casi imperceptible tono de celos y él lo notó
-Bueno- pensó- nada, solo que se llama Isabella Marie pero prefiere que le digan Marie, luego regresó el profesor-
-Oh!- murmure
-Y tu?- me pregunto sin ni siquiera intentar ocultar sus celos
-Se llama Edward Anthony pero prefiere que le digan Anthony- conteste acariciando su rostro para tranquilizarlo y sonrió besándome dulcemente los labios
-No crees que esto es… anormal?- cuestiono cuando nos separamos
-Bueno- dudé- lo pensé durante clase y creo que existiendo vampiros y hombres lobo esto es mas común, no crees?-
-Supongo que tienes razón- sentí como se encogió de hombros- y no crees que deberíamos decírselo a Carlisle?-
-No creo que sea necesario-
-Aunque apuesto a que pronto se enterara, recuerdas? En nuestra familia no existen secretos-
Pensé en sus palabras por un momento, es cierto, en nuestra familia no existen secretos. Asi que Carlisle, si tardará mucho tiempo en enterarse serian como máximo dos días. Como no enterarse? Con los chismes de la gente, aunque a puesto a que deben de dudar puesto que somos sus versiones perfeccionadas, ese pensamiento me hizo sonreír aunque también lo sabría por nuestra familia. Era obvio que se lo dirían o lo descubrirían con los chistes de Emmett (que apuesto a que encontraría buenos chistes) que nos lo recordaría diario y luego también esta Alice… Alice! Mi mente hizo clic cuando pensé en ella y de repente una ola de ira inundo mi cuerpo, ella lo sabia! Lo sabía y no nos dijo nada! Bufe, si claro en nuestra familia no existen secretos. Me levante furiosa, era seguro que se veía el fuego en mis ojos, mis manos estaban cerradas en puños y mi mandíbula apretada. Pero Edward al ver mi postura se alarmo
-Bella que pasa?-
-Ella lo sabía!- grite enfurecida- y no nos dijo nada!-
-De que hablas, amor?-
-Alice!- gruñí y el sonido fue feroz, amenazante; en él estaba cargada toda la furia que sentía
-Bella, cariño!- dijo Edward tratando de tranquilizarme pero su voz sonaba mas como si intentara hipnotizarme- no hagas algo de lo que te arrepentirás luego- le lancé una mirada dura en respuesta- es tu hermana y mejor amiga, cielo- cuando pronuncio esas palabras paré en seco, era verdad, era mi hermana, mi amiga, fue la única que acepto mi relación con Edward desde el principio y nos ayudo, la misma que me trata como una verdadera hermana siempre.
Me sentí sucia, que diablos me pasaba? Pero mi lado menos amable habló "Ella no te confió esto Bella, no debió de habértelo dicho?" me pregunto mi muy traicionera conciencia, pero aún cuando ella no había confiado en mí para decirme que nos encontraríamos con Marie y Anthony, no era para haber actuado de ese modo, no era para querer matarla por esa razón porque si, en mi irreflexivo ataque de ira y dolor (ira porque no me haya advertido al menos y dolor porque no confió en mí) pensé en matarla. Solloce al darme cuenta de que cerca había estado de ir a buscarla y llevarlo a cabo
-Tranquila- murmuro Edward tomándome en sus brazos para sentarme en su regazo y mecerme acunada contra su pecho- se que estabas dolida, pero Alice debe tener una razón para no habérnoslo dicho, ella te quiere mucho, tanto como tú a ella- dijo con voz suave mientras yo seguía sollozando hasta que me calmé
-Lo siento- dije- es solo que creí que confiaba en mi para todo Edward, tu sabes lo mucho que significa para mí eso- suspire
-Lo sé, Bella- contesto con sus labios contra mi cabello- pero no saques conclusiones sin antes hablar con Alice-
-Gracias- susurre abrazándome con más fuerza a él
-Todo sea por ti, cielo-
Nos quedamos el resto del día en ese lugar, hablando de trivialidades, cosas sin sentido, hasta que cayó la noche y me di cuenta que no quería regresar a casa; me daba pena, como podría mirar a Alice a la cara cuando quise matarla? Y aún peor es que ella lo sabe, apuesto a que en sus visiones nos vio hablando y escucho y vio todo, bajé la cabeza avergonzada
-Edward, no quiero volver a casa todavía-
-Porque?-
-Como voy a ver a Alice a la cara cuando quise matarla? Y cuando estoy 100% segura de que ella nos vio en sus visiones y escucho todo lo que dije?- estaba tan absorta en mis sentimientos que no me di cuenta de la llegada de un nuevo acompañante
-Porque fue mi culpa- susurro Alice y yo levante la vista sorprendida de verla frente a mi
-No lo fue, lamento haber reaccionado de ese modo- dije con voz llena de culpa y pesar
-Y yo lamento no habértelo dicho- hizo una breve pausa- pero Bella esto no me incumbe a mi- suspiro- pero bueno yo no te diré que papel hacen ustedes dos, solo déjate llevar, yo te prometo que todo terminara bien- sonrió- aunque con algo de acción en el camino- no entendí mucho de lo que dijo así que solo asentí
-Pero, quiero saber porque ellos son tan parecidos a nosotros y porque tienen nuestros nombres igual, me ayudaras Edward?-
-Por supuesto-
-Entonces, primer paso… averiguar de sus vidas- dije con una sonrisa formándose en mis labios
-Muchachos, olvide algunas cosas en mi auto vuelvo en unos minutos- dijo el profesor sacándome de mis pensamientos, para en el momento de terminar la oración desaparecer de nuestro campo visual
-Hola- dijo el chico de abundantes ojos verdes mientras mi celoso vampiro soltaba un gruñido "Edward, amor, tranquilo te amo y nada más importa. Por favor no cometas ninguna imprudencia" pensé mientras removía mi escudo para que pudiera escucharlo y de reojo lo vi asentir sonriéndome amorosamente para volverse al escuchar a su compañera de banco, bufe y mi Edward sonrió
-Hola- respondí al chico
-Eres Isabella McCarty- afirmó y Edward soltó un bufido
-Solo Bella- contesté sonriendo con superioridad al reconocer que la reacción de mi esposo había sido igual a la mía cuando esa chica le habló a MI ESPOSO coqueteándole pero luego mi sonrisa se amplió al recordar las tantas veces que había utilizado esas mismas palabras hace tantos años en este mismo salón e instituto
-Mucho gusto, yo soy Edward Anthony- respondió y mi boca se abrió, es que además de ser idéntico a mi Edward debía llevar el mismo nombre?- pero prefiero que me llamen Anthony- continúo
-Mucho gusto Anthony- respondí recomponiéndome y en ese momento llegó el profesor, yo entre aliviada y asustada le puse atención; a penas sonó el timbre y Edward salió junto conmigo casi corriendo del salón para adentrarnos en el bosque, cuando estuvimos lo suficientemente lejos ya adentrados en la profundidad del bosque nos detuvimos
-Que fue eso?- murmure atónita
-No lo sé-
-Edward, tengo miedo. Que se supone que hagamos en casos como estos?-
-Bella no te preocupes, nada malo pasará, no lo permitiré-
Me abrazo y nos quedamos en esta posición disfrutando de nada mas que los dos juntos y sin complicaciones
-Edward?- susurre contra su pecho
-Mmm?-
-Que averiguaste de la chica?- mi curiosidad era muy obvia en mi voz con un casi imperceptible tono de celos y él lo notó
-Bueno- pensó- nada, solo que se llama Isabella Marie pero prefiere que le digan Marie, luego regresó el profesor-
-Oh!- murmure
-Y tu?- me pregunto sin ni siquiera intentar ocultar sus celos
-Se llama Edward Anthony pero prefiere que le digan Anthony- conteste acariciando su rostro para tranquilizarlo y sonrió besándome dulcemente los labios
-No crees que esto es… anormal?- cuestiono cuando nos separamos
-Bueno- dudé- lo pensé durante clase y creo que existiendo vampiros y hombres lobo esto es mas común, no crees?-
-Supongo que tienes razón- sentí como se encogió de hombros- y no crees que deberíamos decírselo a Carlisle?-
-No creo que sea necesario-
-Aunque apuesto a que pronto se enterara, recuerdas? En nuestra familia no existen secretos-
Pensé en sus palabras por un momento, es cierto, en nuestra familia no existen secretos. Asi que Carlisle, si tardará mucho tiempo en enterarse serian como máximo dos días. Como no enterarse? Con los chismes de la gente, aunque a puesto a que deben de dudar puesto que somos sus versiones perfeccionadas, ese pensamiento me hizo sonreír aunque también lo sabría por nuestra familia. Era obvio que se lo dirían o lo descubrirían con los chistes de Emmett (que apuesto a que encontraría buenos chistes) que nos lo recordaría diario y luego también esta Alice… Alice! Mi mente hizo clic cuando pensé en ella y de repente una ola de ira inundo mi cuerpo, ella lo sabia! Lo sabía y no nos dijo nada! Bufe, si claro en nuestra familia no existen secretos. Me levante furiosa, era seguro que se veía el fuego en mis ojos, mis manos estaban cerradas en puños y mi mandíbula apretada. Pero Edward al ver mi postura se alarmo
-Bella que pasa?-
-Ella lo sabía!- grite enfurecida- y no nos dijo nada!-
-De que hablas, amor?-
-Alice!- gruñí y el sonido fue feroz, amenazante; en él estaba cargada toda la furia que sentía
-Bella, cariño!- dijo Edward tratando de tranquilizarme pero su voz sonaba mas como si intentara hipnotizarme- no hagas algo de lo que te arrepentirás luego- le lancé una mirada dura en respuesta- es tu hermana y mejor amiga, cielo- cuando pronuncio esas palabras paré en seco, era verdad, era mi hermana, mi amiga, fue la única que acepto mi relación con Edward desde el principio y nos ayudo, la misma que me trata como una verdadera hermana siempre.
Me sentí sucia, que diablos me pasaba? Pero mi lado menos amable habló "Ella no te confió esto Bella, no debió de habértelo dicho?" me pregunto mi muy traicionera conciencia, pero aún cuando ella no había confiado en mí para decirme que nos encontraríamos con Marie y Anthony, no era para haber actuado de ese modo, no era para querer matarla por esa razón porque si, en mi irreflexivo ataque de ira y dolor (ira porque no me haya advertido al menos y dolor porque no confió en mí) pensé en matarla. Solloce al darme cuenta de que cerca había estado de ir a buscarla y llevarlo a cabo
-Tranquila- murmuro Edward tomándome en sus brazos para sentarme en su regazo y mecerme acunada contra su pecho- se que estabas dolida, pero Alice debe tener una razón para no habérnoslo dicho, ella te quiere mucho, tanto como tú a ella- dijo con voz suave mientras yo seguía sollozando hasta que me calmé
-Lo siento- dije- es solo que creí que confiaba en mi para todo Edward, tu sabes lo mucho que significa para mí eso- suspire
-Lo sé, Bella- contesto con sus labios contra mi cabello- pero no saques conclusiones sin antes hablar con Alice-
-Gracias- susurre abrazándome con más fuerza a él
-Todo sea por ti, cielo-
Nos quedamos el resto del día en ese lugar, hablando de trivialidades, cosas sin sentido, hasta que cayó la noche y me di cuenta que no quería regresar a casa; me daba pena, como podría mirar a Alice a la cara cuando quise matarla? Y aún peor es que ella lo sabe, apuesto a que en sus visiones nos vio hablando y escucho y vio todo, bajé la cabeza avergonzada
-Edward, no quiero volver a casa todavía-
-Porque?-
-Como voy a ver a Alice a la cara cuando quise matarla? Y cuando estoy 100% segura de que ella nos vio en sus visiones y escucho todo lo que dije?- estaba tan absorta en mis sentimientos que no me di cuenta de la llegada de un nuevo acompañante
-Porque fue mi culpa- susurro Alice y yo levante la vista sorprendida de verla frente a mi
-No lo fue, lamento haber reaccionado de ese modo- dije con voz llena de culpa y pesar
-Y yo lamento no habértelo dicho- hizo una breve pausa- pero Bella esto no me incumbe a mi- suspiro- pero bueno yo no te diré que papel hacen ustedes dos, solo déjate llevar, yo te prometo que todo terminara bien- sonrió- aunque con algo de acción en el camino- no entendí mucho de lo que dijo así que solo asentí
-Pero, quiero saber porque ellos son tan parecidos a nosotros y porque tienen nuestros nombres igual, me ayudaras Edward?-
-Por supuesto-
-Entonces, primer paso… averiguar de sus vidas- dije con una sonrisa formándose en mis labios
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